[Fuente: SIPSE]
Fecha de publicación:
Jue, 19 Ago 2010 14:49:00
Los 296 mil alumnos del ciclo escolar 2010-2011 estarán en riesgo de consumir alimentos chatarra, drogas u otros productos con sólo extender los brazos desde el interior de la reja de sus respectivos planteles, pues a pesar de las reformas a la Ley General de Salud, que prevén la regularización del menú de alimentos para los estudiantes, la ausencia de "candados" en los reglamentos municipales permite la instalación de vendedores ambulantes que no están debidamente regulados.
Marina González Zihel, titular de la Dirección Contra Riesgos Sanitarios, confirmó que sólo 476 escuelas cuentan con tiendas escolares debidamente concesionadas por la Secretaría de Educación de Quintana Roo (SEQ).
La funcionaria precisó que en estas escuelas de nivel básico, que representan 25% del total que operan en el estado, cuentan con supervisión sanitaria debidamente controlada, el resto se limita a la revisión de los establecimientos de alimentos que operan en los alrededores o bien de la vigilancia que aplica cada ayuntamiento sobre los vendedores ambulantes.
Al respecto dijo que pese a la reforma a la Ley General de Salud y las respectivas modificaciones al marco jurídico estatal, los reglamentos municipales permiten que vendedores ambulantes se establezcan frente a las escuelas, lo que pone al alcance de los alumnos alimentos con alto contenido de carbohidratos, azúcares, grasas, calorías, entre otras sustancias dañinas para la salud de quienes los consumen.
Indicó que actualmente se trabaja con los Ayuntamientos para solicitarles que modifiquen sus reglamentos, "les pedimos que por lo menos se modifique la distancia para el establecimiento de puestos ambulantes, por lo menos 50 ó 100 metros", dijo.
Anunció que al inicio del ciclo escolar, este 23 de agosto, arrancará un programa de actividades con los concesionarios de las tiendas escolares, personal de las escuelas que cuentan con estos servicios, así como un operativo conjunto con autoridades municipales para revisar los alrededores de las escuelas.
Este operativo tiene la finalidad de disminuir la presencia de estos puestos, "que el proceso para modificar los hábitos alimenticios y proteger a los niños sea progresivo, no podemos acabar con malas prácticas de un solo tajo", expresó.
Mencionó que los hábitos alimenticios no se fomentarán en las escuelas, "es algo que debe hacerse en casa, pues en las escuelas sólo deben consumir una colación, los niños deben ir desayunados a sus clases, es una tarea de todos", comentó.
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